Entre 2013 y noviembre de 2024, el Fideicomiso para el Ahorro de Energía Eléctrica (FIDE) ha marcado un hito en el impulso de la energía solar en México, al instalar más de 43,600 sistemas fotovoltaicos con una capacidad total de 126 megawatts (MW), en un esfuerzo que ha sido fundamental para beneficiar tanto a hogares como a micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), especialmente aquellas que enfrentan desafíos relacionados con la pobreza energética.
A través de cinco programas clave, como «Paneles para tu casa», «Paneles para tu negocio» y el «Eco-Crédito Empresarial Masivo», el FIDE ha logrado que las MiPyMEs accedan a soluciones de energía eficiente, permitiéndoles generar electricidad propia y reducir sus costos operativos.
Estos programas han sido respaldados por instituciones como la Secretaría de Energía (Sener), el Fondo para la Transición Energética y el Aprovechamiento Sustentable de la Energía (FOTEASE), así como la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), y la Comisión Federal de Electricidad (CFE), entre otras.
El FIDE también ha llevado a cabo iniciativas como el Programa de Vivienda Social en la Modalidad de Mejoramiento Integral Sustentable y el Proyecto de Eficiencia y Sustentabilidad Energética en Municipios y Hospitales (PRESEMH), que no solo apoyan a las MiPyMEs sino también a comunidades vulnerables, ayudando a disminuir su dependencia de la red eléctrica tradicional. De esta manera, el FIDE contribuye al fortalecimiento de un mercado eléctrico más justo y sostenible.
Uno de los principales beneficios de estos programas es la promoción de la generación distribuida, un modelo que no solo favorece a las MiPyMEs, sino que también tiene un impacto positivo en el medio ambiente porque ayuda a mitigar el cambio climático, transforma el mercado eléctrico y reduce la carga sobre la infraestructura del Sistema Eléctrico Nacional, permitiendo un uso más eficiente de la energía disponible. De hecho, la generación distribuida es clave para cumplir con los compromisos internacionales asumidos en la COP21 de París y reforzados en la COP29, cuyo objetivo es limitar el calentamiento global a 1.5°C.
En este contexto, las MiPyMEs juegan un papel crucial en la transición energética hacia un futuro más resiliente y sostenible, ya que al optar por energías renovables como la solar, no solo se benefician de una reducción significativa en sus costos energéticos, sino que también se alinean con las tendencias globales hacia la sostenibilidad, contribuyendo a un mundo con menos emisiones de carbono y un mercado más equitativo para todos.
Con estos avances, el FIDE reafirma su compromiso con la transformación energética en México, poniendo especial énfasis en el apoyo a las mipymes, un sector clave para la economía del país y fundamental en la lucha contra el cambio climático.
